Un elemento esencial de una organización en materia de Calidad es contar con un sistema de gestión. Sin embargo, es común que las pequeñas empresas reconsideren el tema por percibirlo costoso. Si bien, la implementación del sistema representa una inversión, los resultados derivados del Sistema de Gestión de Calidad ayudarán a incrementar tanto el valor económico y el valor agregado a tus productos y servicios; mejorará la experiencia de nuestros clientes e incluso, mejora su retención.

Pero ¿Qué es un Sistema de Gestión de Calidad? A grandes rasgos, es un proceso formal que se utiliza como herramienta para revisar las operaciones, los productos y los servicios de una empresa, con el objetivo de identificar áreas que pudieran requerir una mejora continua. Es importante señalar que toda empresa con actividad comercial requiere de un sistema de gestión, sin importar su tamaño.

Cualquier pequeña empresa puede competir con los grandes. De hecho, toda empresa debe mantenerse al día, en especial en materia de calidad. La importancia de este aspecto radica en que, si generamos una experiencia satisfactoria a nuestros clientes en la adquisición de nuestros productos o servicios, es altamente probable que generamos lealtad, lo cual se traduce en una nueva compra y, lo más importante, mayores ingresos y beneficios.

En este punto adquiere relevancia un Sistema de Gestión de Calidad, ya que nos proporciona una estructura para orientarnos en proceder de una manera ordenada, eficiente y efectiva, sin importar el tamaño de nuestra organización ni el alcance de nuestros objetivos. En cuanto a la metodología propuesta para un sistema de calidad, basado en la norma internacional ISO 9001:2015, se puede definir como un modelo orientado a la mejora continua: Planear, Hacer, Verificar, Actuar.

Una vez implementado, los principales beneficios obtendrás de un sistema de gestión son:

Eficiencia incrementada: uno de los objetivos de la certificación ISO 9001:2015 es que la empresa cuente con el objetivo de incrementar la eficiencia al máximo. Esta tarea será sencilla debido a que se crearán guías de apoyo en las operaciones y actividades de tus colaboradores.

Motivación de los colaboradores: al contar con guías de apoyo, las funciones de tus colaboradores serán claras y definidas. De esta manera, cada integrante comprenderá el valor de su participación en el funcionamiento de la organización, lo cual generará lealtad reduciendo la rotación de personal, a causa de la insatisfacción laboral.

Reconocimiento internacional: el regirse por la norma internacional ISO dará confianza a cualquier proveedor, cliente, consumidor e incluso competidor debido, entre otras cosas, al prestigio internacional del certificado ISO, que cuenta con presencia en el mercado internacional.

Mejora de procesos: algo importante es no estancarse. Ante ello, al contar con un sistema comprometido con la mejora continua alentará a la organización a aprender de los errores y traducirlos en experiencias de éxito, que a largo plazo se reflejará en nuevas estrategias de crecimiento, nuevos productos o servicios.

En diversas ocasiones, un comprador al momento de decidir sobre la contratación de un servicio suele tomar la propuesta de aquel que cuenta con un certificado en ISO 9001:2015, incluso sin importar el tamaño de la organización, debido a que sienten la garantía que, al contar con procesos claros y definidos será altamente probable que lo contratado esté dentro de sus expectativas o incluso, las supere.

En síntesis, invertir en la implementación de un sistema de gestión de calidad bajo estándares internacionales te traerá beneficios mayores que la inversión inicial. Si cuentas con dudas o deseas más información acércate con nosotros, en Experts contamos con el personal cualificado para orientarte en la implementación de un sistema de gestión de calidad a tu empresa de acuerdo con tus necesidades.

Y tú, ¿Quieres ser Blockbuster o Netflix?, ¡No tengas temor a innovar, un Sistema de Gestión de Calidad es la solución!