Como es sabido por muchos, los derechos humanos fundamentales, son hoy en día uno de los ejes de reflexión con mayor presencia a nivel global, cada día vemos políticas públicas, acciones gubernamentales y de la sociedad civil, enfocadas en lograr que estos derechos sean gozados por todas las personas y pueblos del mundo. Dos de estos derechos son citados con frecuencia cuando se realizan estudios sobre la calidad del aire en México y otras partes del planeta: El derecho a la salud y el derecho a un medio ambiente sano y ecológicamente equilibrado para el desarrollo y bienestar.

Históricamente, pero sobre todo en los últimos años, hemos sido testigos de las repercusiones de la calidad del aire en la salud y la calidad de vida de las poblaciones del mundo, sobre todo, de las ciudades con mayor concentración de actividad humana.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la mala calidad del aire y la contaminación atmosférica urbana aumenta el riesgo de padecer enfermedades respiratorias agudas, como la neumonía y enfermedades crónicas, como el cáncer del pulmón y las enfermedades cardiovasculares. La intensidad del daño a la salud por la contaminación del aire depende de la cantidad de contaminantes que se inhala, el tiempo y frecuencia de contacto, edad y estado de salud de cada individuo.

En agosto de 2019 se publicó en la revista The New England Journal of Medicine el estudio “Ambient Particulate Air Pollution and Daily Mortality in 652 Cities” (“Contaminación ambiental por partículas y mortalidad diaria en 652 ciudades”), en el que participaron investigadores del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) de nuestro país.

Entre los resultados de dicho estudio se incluye la prospección de cerca de 60 millones de muertes en 652 ciudades de 24 países, entre los que se encuentra México. Se observó que en 598 ciudades, al aumentar 10 μg/m 3 en la concentración de partículas PM10, hubo un incremento en un 0,44% de la mortalidad diaria (tanto por causa cardiovascular o respiratoria) y en 499 ciudades donde se incrementó 10 μg/m 3 la concentración de partículas PM2.5, hubo un aumento del 0.68% de mortalidad; estos incrementos aunque parecen no significativos, en una ciudad con altos índices de concentración humana y con alta exposición a contaminantes, puede ser un detonante del incremento en la mortalidad prematura.

A nivel mundial en 2012, se observó que cerca de 570 000 muertes de niños menores de cinco años fueron por consecuencia de infecciones respiratorias; además, el 57% de los casos de la enfermedad por infecciones de las vías respiratorias inferiores en niños menores de cinco años, se atribuyen a la mala calidad del aire y el medio ambiente donde se desenvolvieron (OMS, 2017).

En México, la Secretaría de Salud es el órgano responsable de evaluar la evidencia de los impactos de la calidad del aire y la contaminación atmosférica en la salud y, establecer los límites permisibles de concentración de los contaminantes. Esta institución, ha publicado 4 normas sobre la calidad del aire ambiente y 2 sobre los límites permisibles de partículas suspendidas.

Otro mecanismo para obtener información sobre la calidad del aire en México, es a través del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), quien desarrolló el Sistema Nacional de Información de la Calidad del Aire (SINAICA), que es alimentado por los Sistemas de Monitoreo de 29 estados de la República Mexicana, donde se puede tener acceso a los indicadores del cumplimiento de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) de la calidad del aire y a datos duros tanto de ésta como de variables meteorológicas en tiempo real.

Es claro que la responsabilidad de mejorar la calidad del aire en México y la prevención de las enfermedades asociadas al medio ambiente, es tarea de todas y todos; con cambios pequeños de estilo de vida, acciones personales y organizacionales, influyendo en la promulgación de normatividad estricta en la materia y, desde luego, cumpliendo con las normas vigentes.

Una de las medidas de regulación a nivel organizacional, es la Cédula de Operación Anual (COA), que es un instrumento de reporte y recopilación de información de Emisiones y Transferencia de contaminantes al Aire, Agua, Suelo y Subsuelo, Materiales y Residuos a través del cual se cumplen con diversas obligaciones a cargo de los sujetos regulados en diversas disposiciones, esta Cédula puede ser Federal o Estatal.

La COA Federal se tramita a través del Sistema Nacional de Trámites Electrónicos (SINATEC), en la plataforma COA Web, durante el período oficial de reporte que es el comprendido entre el 1º de marzo y el 30 de junio de cada año.

Para la tramitación de COA Estatal, cada entidad podrá contar un sistema y calendarización diferente, por ejemplo en el Estado de Nuevo León, se presenta mediante la plataforma electrónica COASyS, los sujetos obligados deben concluir con el trámite en abril de cada año; es importante mencionar que la conclusión del trámite se lleva a cabo en forma presencial en las instalaciones de la Subsecretaría de Protección al Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Nuevo León, una vez que se liberan los oficios de entrega en la plataforma. En la actualidad no hay publicación estatal oficial que dé a conocer las instrucciones y formato de la COA Estatal.

Es importante destacar que para las empresas del sector hidrocarburos, este trámite cuenta con regulación mediante homoclave ASEA (ASEA-00-052), se presenta en línea o presencialmente en el área de atención al Regulado de la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos.

En Experts Environmental Consultants estamos comprometidos con el mejoramiento de la calidad del aire y medio ambiente, brindando el mejor apoyo en el cumplimiento de las obligaciones de todos nuestros clientes, es por eso que les animamos para la presentación de la Cédula de Operación Anual (COA) en tiempo y forma, y les reiteramos que contamos con un equipo robusto de consultores especialistas en calidad del aire y la presentación de trámites de este tipo a nivel estatal y federal.